El resultado de las elecciones celebradas ayer en Grecia ha disipado un
factor de incertidumbre (no será el primer país en abandonar la
Eurozona, al menos de momento), pero ha dejado al desnudo las crecientes
dudas sobre la solvencia de España. A pesar de que Europa se ha
comprometido a prestar 100.000 millones para sanear los bancos
españoles, los inversores hacen cuentas y dudan de que una economía
incapaz de generar ingresos, con un tejido productivo depauperado y sin
capacidad exportadora pueda pagar todas las deudas acumuladas.
Ello explica la dramática respuesta de la prima de riesgo que cierra hoy en 585.
Lejos de suponer un bálsamo, los 100.000 millones de euros
solicitados por el Gobierno español para los bancos añaden gasolina a un
incendio sin extinguir: Desde
el primer trimestre de 2008, la deuda española se ha duplicado y a
finales del pasado marzo equivalía al 72,1% del PIB.
El rescate
bancario computará como deuda pública (según ha dejado claro la
oficina estadística europea, Eurostat).
La aparatosa gestión por parte del Gobierno español, primero de la
nacionalización de Bankia y después de la petición de ayuda para el
conjunto del sistema bancario ha generado más preguntas que respuestas.
Ayer, el presidente
del Banco Mundial, Robert Zoellick, criticó la falta de concreción
del plan. "Tenían un gran cartucho y lo han desaprovechado", señaló en
vísperas de la reunión del G-20 que hoy comienza en Los Cabos (México).
Además, persisten las dudas sobre las condiciones, plazos, qué
institución europea aportará los fondos, la prioridad que tendrán estos
respecto a la deuda del Tesoro a la hora de ser amortizados, si las
aportaciones a las entidades se realizarán en forma de préstamos o de
capital...
Ni siquiera se conoce aún la cantidad exacta qué importe será
necesario inyectar en las entidades, aunque esa pregunta se resolverá
esta semana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios soeces o que atenten contra derechos de terceros o de los propios autores, serán eliminados, especialmente los comentarios de ANÓNIMOS. Procura no escribir en mayúsculas todo el texto, ni abreviar palabras... esto no es un SMS (mensaje de móvil) ni cobramos por comentarios, así que escribe cuanto quieras y de la forma más correcta posible, de modo que todos podamos entendernos. Gracias por tu participación.